domingo, 18 de mayo de 2008

El desafío ético emancipatorio de la complejidad en relación a la investigación acción participativa

Resumen Crítico Analítico

El desafío ético emancipatorio de la complejidad en relación a la investigación acción participativa

Carolina Patricia Alvarez Santos, C.I. V.- 13.048.792

Grupo No asistido Nº 01. Entre M@eutikes 8. Núcleo Valera.

Cada sociedad tiene una razón para vivir y sobrevivir tratando de mantener vivo el recuerdo de su memoria social, he ahí el desafío en desarrollar teorías de la complejidad a partir de fenómenos sociales que permitan comprender la dinámica de un entorno social a través de procesos, estructuras y el reconocimiento en la multiplicidad de acciones que permitan definir un esquema cognitivo, pues como lo señala Ovidio (2005) “El enfoque de la complejidad – a mi juicio – da la posibilidad de interpretar las dinámicas propias de un sistema en su relación con el entorno”, y esto resulta ¿complejo? Si, porque el análisis social permite profundizar en un pensamiento pero actuando en conjunto, es decir, con los estudiados como miembros activos de un proceso que va a permitir fortalecer la identidad.

Es por ello que la investigación acción participativa representa al paradigma de la complejidad, pues se relaciona con la diversidad social y multiplicidad de saberes para construir uno nuevo, partiendo de una realidad sociohistórica donde se desarrollan vínculos afectivos, culturales y éticos. Todo esto se traduce en la comprensión de un pensamiento que intenta aproximarse a la complejidad de una realidad con el propósito de transformarla fortaleciendo los valores, cultura y ética sociohistórica; claro esta, todos estos aspectos deben guardar correspondencia con la situación social de ese momento histórico.

Como el mismo Ovidio (2005) lo señala “se trata de que la construcción de sentidos pase por el plano hermenéutico-crítico de la decodificación-interpretación-resignificación de los eventos por los actores sociales, siempre dentro del cuadro referencial de constreñimientos, posibilidades y abordabilidades”, por lo tanto la investigación, como modificador y productor de conocimiento de acuerdo a una realidad dada, implica una búsqueda cercana con el ser humano adaptado a la realidad y a las acciones sociales en la práctica con el fin de optimizar la relación investigador-investigado, ya que esta, permitirá unir fuerzas para una concepción del conocimiento basada en argumentos, informaciones y experiencias específicas. Además, la investigación acción permite reforzar la base organizacional de los grupos involucrados en el estudio utilizando como bases satisfacer las necesidades comunes y permitir la participación del colectivo a través de relaciones de intercambio.

Entonces, es necesario analizar cuidadosamente los vínculos para lograr un trabajo exitoso y realista, dentro de un contexto político, económico, social y cultural; en el desarrollo de estrategias sobre el proceso de transformación de la práctica social y el modelo de conocimiento que facilite una dinámica reflexiva profunda a nivel individual y colectivo en pro de una estructura social con responsabilidades compartidas. A partir de ahí, se podría decir que la investigación acción como desafío ético emancipatorio de la complejidad asegura un medio de aprendizaje partiendo de la cooperación para alcanzar un desarrollo social justo.

Y aunque de todo esto, no escapa del problema de la identidad, ya que es importante destacar que el proceso de transformación de los pueblos ha olvidado de alguna manera la memoria tradicional en pro de la formación cultural de un colectivo, el conjunto de valores, representaciones y estructuras sociales desarrolladas con la intención de ser reproducidas y conservadas en la transmisión de una generación a otra. Aunque las nuevas realidades exigen una nueva perspectiva de cambio e innovación, esto indica que la sociedad en un sistema complejo que de algún modo crea inestabilidad, y, es con la investigación acción participativa que se permitirá evolucionar despertando la creatividad y manejando la flexibilidad como elementos esenciales para la diversidad humana en una sociedad abierta a enfrentar y generar información adaptándose al contexto.

Como resultado, la participación permite la integración social, y este es un aporte importante a la sociología porque ayuda a comprender la complejidad social en el desarrollo de un conocimiento a partir de la realidad siendo sus integrantes los protagonistas los creadores de un nuevo modelo que permita mantener la calidad humana, ecológica, educativa y ciudadana. La complejidad permite la articulación y adaptación de un ecosistema concentrado en marcar un modelo participativo-sustentable con igualdad, respeto e integración de los sectores sociales.

En definitiva, toda sociedad debe intentar dar respuesta a preguntas que permitan construir una sociedad a través del intercambio de experiencias, la participación e integración social como instrumentos concretos de una sociedad creativa, ecológica, con memoria y cultura; en fin orgullosos de nuestras raíces.

Beltrán M.: "La Realidad Social"

Hernández, O.: “Autonomía integradora y transformación social: El desafío ético emancipatorio de la complejidad”

Park, P.: “Qué es la investigación acción participativa. Perspectivas teóricas y metodológicas”

Rahman, M.: "El punto de vista teórico de la IAP"

Rusque, A.: “De la diversidad a la unidad en la Investigación cualitativa”